Precisamente un día antes de la misma, en la inauguración del evento, el director general de AECOC, José María Bonmatí, demandaba al Ejecutivo dicha prórroga, “al menos hasta que la inflación se mantenga estable y controlada y que, en caso de no producirse, se comunique con el tiempo necesario a las empresas, ya que este tipo de medidas no se pueden implementar de un día para otro”.
Bonmatí incidió en que “la presión regulatoria que viven las empresas del sector limita y encarece la producción, exponiéndolas a desventajas competitivas que lastran sus negocios. Ejemplo de ello es el Real Decreto de Envases, que establece la obligación de dejar de vender frutas y verduras envasadas en bandejas de menos de 1,5 kg y, por tanto, exige vender a granel las frutas frescas enteras”.
El director general de AECOC quiso dejar claro que “el sector está totalmente comprometido con el modelo de crecimiento sostenible que persiguen este tipo de reglamentos, que contempla la reducción de emisiones, menos plásticos de un solo uso, menos desperdicio alimentario, etc., y lleva años trabajando en todos esos aspectos, pero no porque lo exija la ley sino sobre todo porque es una demanda del consumidor, de la economía y del conjunto de la sociedad, pero también debemos insistir en que este tipo de medidas exigen de mayor colaboración y también de reflexión sobre el momento y el modo de implantarlas”.
Por todo ello, el anuncio de Pedro Sánchez fue considerado “un acierto” por parte de la organización. “La reducción del IVA de los alimentos se ha demostrado efectiva, a pesar de no aplicarse a productos esenciales de la cesta de la compra como carnes o pescados, y, por tanto, no haberla ampliado habría tenido un efecto muy negativo en la evolución de los precios de los alimentos”. Bonmatí añadió que, “a pesar de que tanto los riesgos geopolíticos como climáticos definen un escenario de trabajo complejo y de gran incertidumbre, las medidas tomadas, tanto por las empresas como por el Gobierno, muestran la voluntad de aliviar al consumidor español de la carga que supone el actual escenario inflacionista, con un impacto claro en determinados productos de la cesta de la compra”.
Una caída del consumo del 13%
Otro de los pilares del programa de esta edición del Congreso fue la presentación del estudio ‘Tendencias de consumo: frutas y hortalizas frescas’ realizado por Freshfel, cuyos datos más relevantes enumeró su General Delegate Philippe Binard. Según el informe, el consumo de frutas y hortalizas en España ha descendido más de un 13% durante los últimos años. Este dato es significativamente superior a la media de los países de la Unión Europea, donde el descenso es algo superior al 5%.
Otra de sus conclusiones es que la tendencia del consumo durante el 2024 seguirá a la baja en volumen, pero que este descenso se verá compensado parcialmente por un aumento del valor de entre un 4% y un 6 %. Además, habrá un cambio de preferencias del consumidor, condicionado por los precios, que afectará particularmente a los productos bio, ya que los consumidores buscarán ofertas y alternativas que se adecúen a sus presupuestos. También se producirá una reducción del tamaño de las compras por visita, pero los clientes acudirán con mayor frecuencia al punto de venta y también crecerán las ventas online.
Posteriormente, en el turno de ponencias, el presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España (Fenacore), Juan Valero de Palma, puso en valor los beneficios del regadío español, explicando que este contribuye a fijar la población del medio rural reduciendo procesos de despoblamiento. Además, genera empleo directo -triplicando el del secano por término medio-, mejora de la calidad de vida en el medio rural y actúa a modo de prevención sobre la erosión y la desertificación, entre otros.
Valero de Palma hizo hincapié en que el futuro del regadío pasa por la sostenibilidad y eficiencia en el uso del agua, la energía, la tierra y los fertilizantes.
En la segunda jornada del Congreso intervino Antonio Khalaf, Vice-president & Country Lead (Retail & CPG) de Circana con su ponencia ‘El mercado del gran consumo y las frutas y hortalizas’, donde quiso transmitir un mensaje de optimismo: “Las frutas y hortalizas crecen en demanda por encima de la media de frescos, y uno de cada diez euros de la cesta de la compra va destinado a frutas y hortalizas, siendo el plátano, la naranja y la manzana los productos que lideran las ventas en frutas, tanto en volumen como en valor, mientras que las hortalizas más vendidas son las patatas, los tomates y las cebollas”.
Khalaf también hizo hincapié en el hecho de que la inflación y las adversas condiciones meteorológicas han impactado duramente al sector hortofrutícola, por lo que “los consumidores se han visto obligados a desarrollar estrategias de supervivencia y consumo consciente para intentar abaratar el gasto de la cesta de la compra, como comprar más productos esenciales o priorizar los descuentos y promociones. Además, los consumidores están redefiniendo el concepto tradicional entre lo que es esencial y discrecional en su cesta de la compra, surgiendo una nueva subcategoría, los productos esenciales en transición, un grupo de productos que el consumidor sigue considerando importantes, pero que compra de forma más reflexiva”.
El portavoz de Circana acabó destacando que el futuro del sector está en la gestión por categorías en colaboración con el con el retailer y la promoción del producto fresco.
A continuación, Marta Munné, responsable de estudios Shopperview en AECOC, presentó durante su ponencia ‘Tendencias en la compra y consumo de frutas y hortalizas’ los datos de la segunda edición del barómetro ‘Las demandas del comprador de frutas y hortalizas’, elaborado por AECOC Shopperview en colaboración con Patatas Meléndez. Una de las conclusiones del informe es que los aspectos clave en la decisión de compra de frutas y hortalizas por parte de los consumidores son que sean de temporada (con un 55% de menciones), el aspecto u olor del producto (con un 51%), el precio (con un 45%) y el hecho de que sean de proximidad (también con un 45%).
Por otro lado, en cuanto a los hábitos de compra, Munné explicó que hasta el 76% de los consumidores planifica más las compras para evitar que las frutas y hortalizas se estropeen en casa y evitar así el desperdicio alimentario, que el 73% tiene más en cuenta el precio que antes, aunque sin renunciar a la calidad de los productos que compra, y que el 57% evita el plástico en los envases y prefiere cartón o bioplástico o compra menos envasado pensando en el impacto medioambiental.
Por último, las frutas y hortalizas también han sufrido el impacto de la inflación y, en ese contexto, el consumidor busca promociones, realiza cestas más pequeñas y opta por las compras a granel. Además, el 31% de los consumidores han cambiado de establecimiento buscando mejores precios y, el 24% ha dejado de comprar algunas frutas y hortalizas que antes adquiría para comprar otras más económicas.
Alberto Rodríguez de Lama, cofundador y presidente ejecutivo de TheCUBE, afirmó en su ponencia ‘El Tsunami tecnológico’ que la clave para el sector reside en entender cómo aplicar las nuevas tecnologías de forma eficiente ya que “aún no somos capaces de entender toda la evolución tecnológica que está ocurriendo actualmente en nuestro planeta. En toda revolución tecnológica siempre se impone el mismo patrón: periodo de insolación, colapso económico y posteriormente la llamada época dorada”. Rodríguez añadió que nunca hemos tenido que adaptarnos tan rápido a las nuevas tecnologías y que, a modo de ejemplo, “ChatGPT es la adopción tecnológica más rápida de la historia”.
El economista Juan Ramón Rallo quiso añadir que los problemas del campo no están vinculados a la cadena de valor, ya que es precisamente esta la que posibilita que el consumidor adquiera sus productos. Imponer nuevos impuestos a los supermercados reducirá sus beneficios y solo provocará que el productor gane menos y el consumidor pague más.
El encuentro contó este año con la presencia de cerca de 700 profesionales de destacadas compañías de todo el país.
Mesa redonda sobre comunicación y marketing El Congreso incluyó una mesa de debate liderada por Piedad Coscollá, directora de marketing de Anecoop, con la participación de Plátano de Canarias y Sakata Seed Ibérica, sobre estrategias de marketing y comunicación. En ella se habló, entre otros temas, de Love Klabaza, iniciativa que ha ayudado a incrementar el consumo de calabaza en una media de un 20%, tanto en fresco como en IV gama, donde su crecimiento ha sido muy notable, según resaltó Cari Plaza, la directora de marketing y comunicación de Sakata Seed Ibérica, la empresa de semillas que coordina el proyecto. La clave del éxito del modelo de Love Klabaza, donde participa el 85% de los productores de España y Portugal, se basa en tres pilares, indicaron sus promotores: unión, confianza y participación. “Unión porque con la creación de esta marca paraguas de categoría los productores apuestan por el interés general, frente al individual. Confianza, porque delegaron en los profesionales del marketing y participación, porque intervienen activamente etiquetando producto con la marca y donando calabazas en las acciones en los colegios”, explicó Plaza, quien también insistió en la necesidad de incrementar la visibilidad de las campañas en los lineales de los supermercados, que es un punto esencial de interacción con el consumidor. Sergio Cáceres, gerente y director de marketing de Plátano de Canarias, destacó el valor de la marca como prescriptora al consumidor y la necesidad de alinear los ejes de comunicación al lenguaje y territorios de la audiencia: “Nosotros sin publicidad no existiríamos. En el último estudio realizado para ver los resultados del videojuego dirigido a la población más joven se ha aumentado el consumo en los hogares impactados”. Según Cáceres, "la publicidad es un factor de supervivencia para el sector del plátano. Por muchos atributos que tenga el producto, es necesario proyectarlo y que lleguen para que se conozcan". Como conclusión, Piedad Coscollá resaltó que “se ha demostrado con estos ejemplos que la comunicación y la publicidad sí aumentan el consumo, por lo que es responsabilidad de todos, productores y distribuidores dar visibilidad a las frutas y hortalizas”. |